No concebimos nuestro día a día sin uno de ellos.  En el Día Mundial de la tortilla de patatas, os contamos curiosidades del pintxo de tortilla de patatas, un imprescindible en nuestras barras.

Se dice que allá por 1835, en plena guerra carlista, el general Zumalacárregui cansado y hambriento, se acercó al caserío de María Tirgo. Ella, ansiosa por prepararle algo para comer, cogió lo único que tenía en la despensa: patatas cocidas y huevos. El resto, es historia de la gastronomía.

El concepto ha evolucionado y ahora las preparamos de mil formas diferentes: con cebolla, sin cebolla, con pimientos, más cuajada, más líquida…. Hoy en día hay tantas formas de hacer las tortillas como cocineros existen. Y siempre para gusto de todos los paladares.

¿Qué ha de tener un buen pintxo de tortilla de patatas? 

Sin duda lo más importante es un buen producto. Para que un pintxo de tortilla de patatas sea de diez hemos de cuidar mucho sus ingredientes.

Nuestros favoritos son:

●      Patata de Álava.

●      Cebolla de Zalla, sí somos pro-cebolla en la tortilla.

●      Huevos de caserío de gallinas felices.

●      Sal de Añana.

●      Aceite de oliva virgen de Rioja Alavesa (variedad arróniz).

Y ahora llega el turno de conocer algunos trucos para elaborar una buena tortilla de patatas. Como decíamos hay tantas formas de preparación como cocineros, pero os contamos nuestra favorita:

●      La patata ha de estar cortada muy  fina y dejaremos que se confite en aceite de oliva virgen.

●      Nos gusta que la cebolla esté casi caramelizada.

●      Impregnar la patata y la cebolla en los huevos semi batidos, antes de cuajarla en la sartén.

●      Nos gusta que la tortilla quede jugosa y con el punto de sal perfecto.

En Euskadi el momento del almuerzo, el “hamaiketako” es tradición y no hay nada mejor que un café acompañado de un buen pintxo de tortilla.

Afortunadamente tenemos grandes profesionales que hacen tortillas deliciosas. Os invitamos a recorrer las barras de nuestros bares y restaurantes, y degustar sus tortillas, ¡vais a querer probarlas todas!

Ya solo nos queda deciros que las disfrutéis.

On egin!